Gracias Dios por el día que nos das.
Infinito como el cielo es tu amor,
tu bondad nos bendice cada mañana,
cada tarde y aún en las noches.
Gracias Señor por preparar todo en su lugar
cuando despertamos sabemos que habrá claridad,
claridad en tu creación, claridad en pensamientos
para tomar buenas decisiones,
para conducirnos como debemos hacerlo.
Gracias Dios por tu fidelidad,
nunca cambias y nunca tu amor se acabará,
eres lo máximo, lo más maravilloso
que he podido experimentar en esta tierra.
Te rogamos que nos des sabiduría
para decir las cosas y para callar otras,
para cuidar nuestros pasos del lugar que quieran ir
y para abrazar a otros como tú lo harías.
Amén.
por Mery Bracho
El amor inagotable y la verdad se encontraron;
¡la justicia y la paz se besaron!
La verdad brota desde la tierra,
y la justicia sonríe desde los cielos.
Sí, el Señor derrama sus bendiciones,
y nuestra tierra dará una abundante cosecha.
La justicia va delante de él como un heraldo,
preparando el camino para sus pasos. Salmo 85